El Liceo Abate Molina en Talca cumple cinco días en paro tras la polémica aprobación automática del Plan de Educación Municipal (PADEM 2026), luego de que el Concejo Municipal rechazara el plan. Estudiantes y docentes expresan preocupación por posibles despidos y falta de información, mientras la municipalidad defiende la medida como necesaria para sostener el sistema educativo local.
Compartir
El Liceo Abate Molina de Talca cumple hoy cinco días en paro debido a la polémica aprobación del Plan Anual de Educación Municipal (PADEM) 2026.
La controversia surgió luego de que el Concejo Municipal de Talca rechazara el PADEM del próximo año. A pesar de esto, el plan se implementará de todas formas, pues así lo establece Contraloría: si no hay acuerdo en el Concejo, rige automáticamente la propuesta del alcalde para evitar la paralización y asegurar la continuidad operativa del sistema.
Tras una tensa sesión en el Concejo, el alcalde Juan Carlos Díaz pidió dejar las peleas de lado y actuar con sentido de propósito común: “Más que una imposición, esto es una invitación. Aquí no hay vencedores ni vencidos. Lo que importa es asegurar el futuro de la educación pública y garantizar que nuestros niños y niñas reciban oportunidades reales. Talca siempre ha avanzado cuando trabajamos unidos y esta vez debe ser igual”.
La raíz del conflicto
Según explicó el jefe comunal, Talca tiene cada vez menos estudiantes en los colegios municipales, lo que afecta directamente el financiamiento estatal. De acuerdo con el municipio, en 2022 el sistema municipal contaba con 21.247 estudiantes, sin embargo, en 2025 la cifra bordea los 20.000.
Para evitar que el sistema colapse, la Municipalidad de Talca ha debido inyectar recursos: en 2023 aportaron $1.000 millones adicionales, en 2024 $1.500 millones y en 2025 la cifra va en $4.200 millones.
Así, para poder sostener el sistema, la propuesta original del edil contempla la fusión de cursos con muy pocos alumnos. Si bien el plan era juntar 111 cursos, finalmente el PADEM ejecutará solo 67 fusiones. “No podemos sostener cursos con 10 o 14 estudiantes. Reorganizar no significa debilitar la educación pública; significa protegerla para que perdure y se fortalezca”, dijo el alcalde Díaz.
Crece la tensión por supuestas desvinculaciones
Tras la aprobación del PADEM 2026, una de las grandes preocupaciones de la comunidad educativa del Liceo Abate Molina fue el futuro de sus docentes. En consecuencia, el Gremio de Profesores del establecimiento se movilizó y realizó una acción llamada “lápices caídos”, que consiste en mantenerse dentro del liceo, pero sin clases formales. En cambio, desarrollan actividades que fomentan la reflexión y el diálogo como forma de expresar su descontento.
A través de un comunicado, el gremio señaló que “esta acción responde a la preocupante realidad que enfrenta nuestro establecimiento, debido a las posibles desvinculaciones de profesores a contrata y la reducción de horas de docentes titulares”.
Sin embargo, el descontento de la comunidad no se detuvo ahí. El pasado lunes 10 de noviembre el Centro General de Alumnos y Alumnas anunció que el liceo se encontraba en paro “debido a la delicada situación en la que diversos docentes se encuentran actualmente”.
En otro comunicado, el centro de alumnos afirmó: “Consideramos injusto que no nos hayan entregado información transparente sobre cómo se elaboró el PADEM, cuáles fueron los motivos generales que lo sustentan y de qué manera afecta directamente a nuestra comunidad educativa, viendo perjudicados a más de 30 profesores de nuestro establecimiento”.
A través de su cuenta de Instagram, el centro de estudiantes aclaró: “No buscamos conflicto, buscamos una solución justa, donde ningún profesor tenga que irse por consecuencia de una mala gestión”.
Por su parte, el alcalde Díaz desmintió distintas versiones sobre despidos masivos: “No existen 400 despidos. Eso es falso. Hay procesos de no renovación que serán evaluados nuevamente en marzo, cuando tengamos la matrícula definitiva”. El edil añadió: “Si lográramos aumentar la matrícula en un 1 o 2%, una parte importante de esos contratos podrá reincorporarse. El desafío común: crecer en matrícula para sostener el sistema”.
Una movilización en apoyo a los docentes
El jueves 13 de noviembre los estudiantes organizaron una marcha “contra el despido de nuestros profes”. Ese mismo día el centro de alumnos afirmó que muchos de los presentes “fueron atacados con chorros de agua y gases”.
“Muchos de estos ataques se han dado simplemente porque los estudiantes estaban apoyando la marcha, impidiendo incluso que pudieran llegar a punto de ayuda. Han sido perseguidos y se ha intentado mostrar estas marchas como si fueran dañinas, cuando siempre han sido completamente pacíficas”, dice su último comunicado.
Fuente: The Clinic